A veces cuando pensamos en que juego hacer la review, miramos en nuestro histórico por si ya escribimos unas líneas en esta humilde página. La cuestión es que me ha venido a la cabeza Prehistorik, un simpático juego de plataformas que de pequeño me entusiasmaba, me parecía muy divertido. Y, efectivamente, ya escribimos sobre él, pero hace la friolera de ¡8 años!. Pero nada iba a detener mis ganas de escribir sobre Prehistorik, así que ¿Por qué no hacerlo de la segunda parte?

Retro Review de Gopher [Recordando]

El protagonista de hoy es un sencillo y simpático juego exclusivo de Atari 2600 en el que un pobre granjero tiene que evitar que un grupo de tuzas le robe su preciada cosecha de zanahorias. ¿Lo conseguirá?

Hoy os traemos Traitors Gate. En cierta manera, os puede sorprender porque solemos irnos mucho más atrás, pero ya han pasado 23 años desde su lanzamiento y quizá merezca tener también unas frases en esta página.

Como a muchos otros jugadores, la temática ninja siempre me ha llamado mucho la atención. Poderosos guerreros entrenados en las artes marciales y místicas que pueden luchar contra todo tipo de enemigos, ¿A quién no le puede gustar eso? Además, me recuerdan mucho a mi juventud, entre los 80 y 90, en la que los ninjas estaban de moda y había todo tipo de productos relacionados con ellos. Hoy vamos a hablar de Ninja Combat, un título de acción que salió en plena fiebre ninja.

A finales de los 80, las incipientes compañías españolas de videojuegos vieron en los deportistas un auténtico filón para vender juegos. Eran licencias que permitían mejorar muchísimo las ventas, incluso por encima de las cinematográficas, y Dinamic Software Topo Soft rivalizaron en cierta manera en este campo de batalla, contratando la imagen de diferentes jugadores para sus videojuegos. Sin ir más lejos, Dinamic contrató a Michel, mientras que Topo Soft haría lo propio con Butragueño, ambos futbolistas del Real Madrid.