Hace un tiempo (seis años para ser concretos) os hablábamos de The Castle of Dr. Brain, el archiconocido juego de puzzles e ingenio desarrollado por Sierra, porque no todos sus títulos de éxito iban a ser aventuras gráficas. Sin embargo, además de lo original de sus puzzles, una de las cosas que llamó la atención de este título, es este toque aventurero a medida que desentrañabas el misterio resolviendo puzzles, aderezado con un genial diseño gráfico.

Los juegos de espías siempre han estado a la orden del día en el mundo de los videojuegos, abarcando géneros variopintos como infiltración, shooter en primera persona o conducción. En esta ocasión nos vamos a principios de la década de los 80 para hablar de Spy Hunter, un título que mezcla conducción y acción, el cual cosechó un gran éxito en los salones recreativos de la época.

A mediados de los 90, las aventuras gráficas empezaban a dar signo de agotamiento. El género que había arrasado a finales de los 80 y principios de los 90, veía seriamente peligrar su posición dominante, ante el empuje de otros géneros que, espoleados por el progreso tecnológico, se estaban empezando a hacer un hueco, cómo los shooters.

Hoy volvemos a los salones recreativos para hablar de uno de los clásicos juegos de carreras, Super Off Road, el cual nos permitía disfrutar de unas carreras de coches todoterreno realmente frenéticas y divertidas.

Desde el nacimiento de los videojuegos, el género deportivo ha sido siempre un auténtico filón. Domina, cómo siempre, el fútbol, pero hay otros deportes que gozan de gran éxito cómo el baloncesto (especialmente el centrado en la NBA), el tenis o el boxeo, aunque hay otros juegos muy conocidos de golf. Eso sin contar los juegos de carreras deportivas. Pero, ¿Cuántos juegos de voley playa hay? Pues seguro que no muchos. Quizá lo más parecido que podemos encontrar es Windjammers, pero no es voley playa cómo tal, si no una readaptación arcade de este deporte.