Revolution Software era una de esas empresas que desarrollaba Aventuras Gráficas a la sombra de LucasArts. Sus dos primeros títulos (Lure of the Temptress y Beneath a Steel Sky) fueron grandes juegos y bien recibidos por el público, pero no fue hasta su siguiente juego, Broken Sword, cuando consiguieron su gran éxito comercial y la creación de una saga que dura hasta el día de hoy.