Creo que hoy en día nadie duda de la enorme importancia que ha tenido Electronic Arts, especialmente bajo su sello EA Sports, en el mundo de los videojuegos deportivos. Ya sea FIFA, Madden, NHL, NBA Live... han dominado siempre con puño de hierro, con la única y gloriosa excepción de un lapso de tiempo de escasos años donde International Superstar Soccer Pro, luego conocido como Pro Evolution de Konami, consiguió arrebatarle el cetro. Pero las aguas vuelven a su cauce, y FIFA vuelve a ser con diferencia el más popular, aunque veremos en los próximos años, puesto que han perdido la licencia.

En los años 80 y 90 era bastante común hacer juegos basados en otros medios, como películas, dibujos o cómics. En ocasiones el juego llegaba a nuestras tierras, pero no el producto original en el que se basaba, y ese es el caso de Warriors of Fate, nuestro protagonista de hoy, un espectacular beat 'em up creado por Capcom.

Hoy es de aquellos días en los que mirando de qué juego podría hablar, he topado con uno que jugaba de pequeño y no recordaba el nombre: Circus Attractions. Para más coincidencias, el juego fue desarrollado por Golden Goblins, una compañía con sólo tres juegos... siendo uno de ellos M.U.D.S., precisamente del que hablamos hace dos semanas. Casualidades de la vida! Aunque en realidad, Golden Goblins he descubierto que no era una compañía como tal, si no una marca de la propia Rainbow Arts.

La lucha libre, también conocida como wrestling, es un espectáculo que lleva ya muchas décadas cosechando éxitos, sobre todo en Estados Unidos, su país natal. Fue en la década de los 80 cuando este es espectáculo tuvo su boom a nivel mundial y empezaron a salir todo tipo de productos para explotar la marca, entre los que no podían faltar los videojuegos. Nuestro protagonista de hoy es WWF Superstars, el cual fue el primer juego arcade basado en la WWF (World Wrestling Federation).

Un año antes de que sacaran su magnífico Mad TV, los alemanes de Rainbow Arts lanzaron al mercado un peculiar juego deportivo llamado M.U.D.S.: Mean Ugly Dirty Sports, donde para ganar tenias que ser lo más sucio y tramposo que se te ocurra. Como solía ser habitual en la compañía, el juego estaba plagado de humor, aunque en este caso predomina la violencia y las malas artes.