Guía de Curse of Enchantia

III - La Aldea

Solución

SALIMOS al exterior donde una "monstrua" no deja de achucharnos. En uno de sus "cariños", provoca la caída de la máscara y, asqueada por nuestra belleza, huye despavorida. Tras la roca central, nos hacemos con otro diamante y nos alejamos hacia el fondo del camino. Llegamos a un río con un puente y al dirigirnos hacia él, un salteador de caminos viene corriendo hacia nosotros con malas intenciones. Pero tropieza con una piedra y se desploma dejando caer su espada. La agarramos y le atacamos, haciéndole desaparecer. En su lugar, se encuentra ahora una bolsa de dinero que nos apresuramos a coger. Estamos en la entrada del pueblo y, nada más llegar, dos guardianes nos cierran el paso. Sólo nos queda encaminar nuestras pesquisas en otra dirección. En esta ubicación, se encuentran la tienda de comestibles del tío Frank y la taberna. En esta última, el dueño no atiende a razones y nos expulsará cada vez que intentemos traspasar su cuerpo. El tendero una vez saludado, nos indica que vende carne a precio de saldo. Como aquí no podemos hacer nada, vamos al centro del pueblo. Allí hay una fuente y detrás, un doblón y un diamante. Los cogemos y nos dirigimos a la izquierda. Estamos en la calle de la "foca-maga" Sally, donde encontramos una puerta que nos lleva a una estancia en la que vemos un cajón. Más adelante, vemos la entrada de la tienda de Sally. Entramos y nos dice que con dinero todo es posible. Le entregamos algo de "pasta" y nos informa de la existencia de un mago. Nos marchamos y, continuando hacia la izquierda, vemos una cucaracha que nos impide el paso hacia la parte oeste. Desandamos lo andado, y nos encaminamos hacia la calle de la derecha. Vemos una boca de riego, un bicho, un par de cerraduras y dos mejicanos dormitando. Igualmente, vemos una tienda de disfraces, propiedad de alguien llamado Benn, pero la puerta está cerrada. Así que, otra vez de vuelta. Nos adentramos en la calle central y vemos una manada de borregos que nos impide la salida. A la derecha, hay unas escalinatas que conducen a una casa. Entramos y vemos una estancia similar a la que encontramos en la calle de Sally. A la izquierda, hay una entrada que, recordamos; es la que nos había señalado Sally. Entramos y nada más hacerlo nos aparece un Mago. Le damos parte de nuestro dinero y, complacido, nos manda, con un hechizo, a la siguiente fase.

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