Ecologismo aventurero
Hoy en dia, nadie puede dudar que el gran éxito de Sierra se debió en gran parte a sus aventuras gráficas. Además, llegaron a tocar todos los palos: erótico-cómicas (Larry), históricas (King's Quest), policiacas (Police Quest), espaciales (Space Quest), terror-intriga (Gabriel Knight)..., muchas de ellas aderezadas con buenas dosis de humor, a excepción de Gabriel Knight. Teniendo en cuenta que nos dejamos algunas, cabe destacar que también tuvieron en cuenta a los más pequeños, lanzando EcoQuest, una sencilla aventura que hace del ecologismo su bandera, todo un canto para cuidar nuestro planeta.
Esta aventura estuvo diseñada e ideada por Jane Jensen, que a priori podemos no conocer, pero si os digo que es la escritora que creó años más tarde Gabriel Knight, seguro que ya tiene el respeto ganado de más de uno.
Como hemos comentado anteriormente, fue una apuesta clara de la compañía para cubrir ese incipiente nicho de mercado que empezaba a florecer a principios de los 90, donde los niños pre-adolescentes (este juego está recomendado para edades comprendidas desde los 8 a los 14 años) se veian hechizados por el mundo de los videojuegos.
Bajo esta premisa diseñaron una aventura gráfica con una intefaz point & click clásica de Sierra, bastante sencilla, donde disponíamos de una barra superior con las acciones básicas que podíamos realizar (caminar, ver, accionar, hablar, acceder al inventario y reciclar), así como el recurrente sistema de puntos que se irá incrementando a medida que avancemos. No será necesario completar el marcador para finalizar el juego, pero si no lo hacemos será un aliciente para rejugarlo.
Respecto a la historia nos centramos en Adam, el hijo de un buceador ecologista que dirige un centro de conservación y ayuda para animales marinos. Adam es muy tímido, así que para conseguir que se socialice su padre le dice que pase tiempo con un delfín que está convaleciente en el centro, por haber estado atrapado en unas redes.
Adam se pone a jugar con él y, sorprendentemente, el delfín se pone a hablar con él. Al principio, Adam no cree lo que le está sucediendo, pero poco a poco se hace a la idea de lo que le está explicando el delfín Delphineus (que original el nombre!). Éste le explica que hay una civilización sumergida, llamada Eluria, necesita su ayuda puesto que Cetus, una enorme ballena que ostenta el título de rey, ha desaparecido. Cetus realizaba un trabajo fundamental en Eluria, como mantenerla limpia de residuos que los humanos lanzan al mar. Ahora Eluria es una civilización amenazada por la suciedad y por una malvada Raya, a la que apodan "El Carnívoro".
Debido a su público objetivo, visualmente es un juego muy colorido y está desarrollado como un cuento moralizante, donde pone el ecologismo en primer plano, de hecho, para completar el total de puntos deberemos reciclar o limpiar todo aquello que veamos, aunque en la mayoría de momentos no será obligatorio.
Por otra parte, los puzzles son bastante sencillos de resolver y la historia de una linealidad extrema, algo impensable en cualquier otra aventura de Sierra, donde la dificultad está presente en todo momento.
Lo más destacable para mi gusto en esta aventura es la guionización de la historia, que sin ser excesivamente innovadora, resulta efectiva para que los más pequeños se entretengan y decidan jugar hasta el final.
En resumen, EcoQuest: Search for Cetus, no se podría considerar una gran aventura para los aventureros más experimentados, que seguramente no tendrían ni para empezar debido a su baja dificultad, pero que sin duda entretiene sobre todo si juegas en la edad indicada.