Recordando
Retro Review Urban Runner

La fiebre de los FMV

A mediados de los 90 se produjo un cambio que revolucionó el mundo de la informática en general y el de los videojuegos en particular: el cambio del soporte físico a las nuevas tecnologías ópticas. La irrupción del CD con su enorme capacidad respecto a sus coetáneos (disquettes y cartuchos principalmente) dió muchas más posibilidades a los desarrolladores que ya no tenían que preocuparse en exceso por la capacidad del soporte de almacenamiento.

En este hervidero se introdujeron los FMV o Full-Motion Video, una nueva técnica narrativa donde videos pregrabados sustituían a los sprites, vectores o modelos 3D para mostrar la acción del juego. En muchos de ellos se utilizaba simplemente como escenas de corte entre partes jugables, pero en otros funcionó como película interactiva. El juego que tratamos en este recordando, Urban Runner, pertenece al segundo grupo, aunque aparecieron otros como Los Justicieros, de desarrollo español, o Mad Dog McCree.

Para grabar las secuencias del juego se utilizaban actores de serie B o de Televisión, así como material de filmación bastante amateur, para reducir costes, ya que filmar en plan cinematográfico disparaba excesivamente la producción del videojuego. Hubo un par de compañías formadas exclusivamente para el desarrollo de este tipo de juegos como American Laser Games o Digital Pictures, aunque tuvieron tan corto recorrido como los propias FMV.

En Urban Runner nos metemos en la piel de Max, un periodista americano que se encuentra en París cubriendo la historia de un narcotraficante protegido por un político influente. Para hacer que el narco hable Max le quiere enseñar unas fotos, pero cuando llega, el narco está muerto, por lo que nuestro protagonista se ve acusado por los testigos por un asesinato que no ha cometido. En este momento se iniciará una frenética huída por la ciudad intentando resolver el crimen, con unos matones pisándonos los talones.

El juego tiene un funcionamiento similar a las aventuras gráficas, puesto que tenemos nuestro inventario para poderlo utilizar en los momentos y escenarios oportunos, aunque bien es cierto que la cantidad de acciones a realizar es mucho menor que en una aventura gráfica. El juego combina las escenas de investigación, donde deberemos escudriñar el escenario en busca de pruebas u objetos que nos sirvan más adelante, con las de acción en la que deberemos deshacernos de quienes nos persiguen.

Por otra parte, consta de varias escenas que pueden considerarse como minijuegos, al tener que abrir una caja fuerte con una hoy en día arcaica Olivetti Notebook (!).

En Urban Runner se podía morir o dar por finalizada nuestra aventura, de mil y una maneras posibles, ya que en algunos escenarios teníamos o bien tiempo limitado, o bien teníamos que disponer los objetos nuestros y del escenario de una cierta forma, antes de iniciar la secuencia de video posterior donde, si lo habíamos hecho bien, se mostraba la escena que nos haría avanzar; de lo contrario, nos mostraba la escena negativa donde a nuestro protagonista lo linchaban o algo parecido.

El juego fue desarrollado por Coktel Vision en 1996 y fue el último juego que publicó hasta que ocho años más tarde publicaría un juego educacional antes de entrar en bancarrota. Urban Runner llevo al aprieto económico a la compañía, ya que tuvo escaso éxito al tener unas exigencias en gráfica y monitor bastante grandes para el momento.

Urban Runner fue un juego simpático en su momento, pero que hoy en día costaría jugar. Además, las FMV tuvieron un escaso tiempo de vida, ya que se vieron sustituidas en poco tiempo por modelados en 3D y renders bastante realistas que hicieron que no tuviera sentido utilizar estas secuencias de video ya que ofrecían una pésima calidad en comparación. A la vista está que rara vez se ha vuelto a utilizar en nuestros días, utilizando a los actores simplemente para captar sus movimientos pero no para mostrarlos directamente en la pantalla de nuestro ordenador.