Ruta hacia China
A principio de los 90, la efervescencia en el género de aventuras era tal que los aventureros apenas podían degustarlas todas. A la sombra de las míticas aventuras de LucasArts o Sierra, aparecieron otras que gracias al esfuerzo de sus desarolladores y a los elementos innovadores que aportaron consiguieron hacerse un hueco y ser recordadas con el paso de los años.
Y este es el caso que nos ocupa en el recordando de hoy. Heart of China fue una aventura desarollada por Dynamix, compañía adquirida por Sierra en el 1990 para que desarrollase principalmente juegos de simulación, aunque también se adentraron en el territorio de las aventuras gráficas.
Nos ponemos en la piel de un intrépido aventurero, 'Lucky' Jacke Masters, un aviador ex combatiente de la Primera Guerra Mundial, quien es contratado en Hong Kong por E.A. Lomax, un importante hombre de negocios dedicado al transporte naval, cuya hija ha sido secuestrada por Li Deng, uno de los señores de la guerra.
Para salvar a su hija, Lomax le ofrece una recompensa inicial de 200.000$, que irá disminuyendo en 20.000$ cada día que pase del día de entrega pactado. "Lucky" no podrá negarse debido a que debe dinero al magnate, quien le prestó ese dinero para formar una compañía de barcos para turistas que no funcionó correctamente. Bajo esta premisa, nuestro aventurero deberá adentrarse en el corazón de China y encontrar a la querida hija de Lomax.
El juego tiene muchísimos puntos en común con la película "La Gran Ruta Hacia China", cine de aventuras ochentero a cargo de Tom Selleck.
Una vez puestos en situación hagamos enfoque en las características del juego. Dynamix decidió proseguir el buen trabajo que hizo con su aventura anterior, la cyberpunk Rise of the Dragon, reutilizando el motor DGDS (Dynamix Game Development System) que incorporaba ciertos elementos bastante innovadores:
- Cambio de personajes para poder aprovechar las habilidades de cada uno dependiendo la situación.
- Intercambio de ítems entre los personajes.
- Las acciones del presente pueden afectar al futuro de la aventura.
- Sucesos en tiempo real: estemos o no en el lugar en cuestión, la aventura transcurre paralelamente en todos los lugares, teniendo que completar ciertas tareas antes de un tiempo determinado.
El juego transcurría en una visión en primera persona y el puntero del ratón indicaba la acción a realizar. En la parte inferior de la pantalla se podía acceder al inventario, tanto para utilizar ítems como para traspasarlo entre personajes. Se podría decir que en cierto modo era una evolución del SCUMM más primitivo.
Una de las características que sin duda más juego daba, era poder cambiar entre personajes. De esta forma el jugador tenía que conocer las habilidades y posibilidades de cada uno y explotarlas en los momentos adecuados, rompiendo un poco la linealidad de las aventuras con un solo protagonista jugable.
Como elementos adicionales a destacar merece la pena comentar que el juego tiene dos secuencias de acción, donde el jugador deberá pelear, en una de ellas en el techo del tren The Orient Express. Por otra parte, ciertas acciones provocaban la muerte del personaje y las elecciones que tomáramos en los diálogos tenían sus consecuencias en el futuro.
Mención aparte merecen los gráficos. Los escenarios fueron dibujados a mano a partir de fotografías reales, digitalizándolos posteriormente para su inclusión en el juego. También se utilizaron actores reales para las secuencias, que también pasaron por el tratamiento digital adecuado para poder ser incluídos en la aventura, debido a las limitaciones técnicas de la época.
Sin duda alguna, una aventura gráfica a tener muy en cuenta, en ocasiones olvidada por no ser de una de las grandes compañías (a pesar de que salió bajo el amparo de Sierra), pero no por ello hay que desmerecer sus virtudes, que las tiene.