Sobreviviendo en una ciudad decadente
Seguimos en nuestro empeño de tener una retro review para todos y cada uno de los juegos desarrollados por compañías españolas en la etapa que popularmente se conoce como: "La edad de oro del software español". En esta ocasión, le toca el turno a un título de Topo Soft. El juego en cuestión es Metropolis, aunque nada tiene que ver con la obra maestra del cine expresionista alemán del mismo titulo, dirigida por Fritz Lang allá por el 1927.
Sí tienen algo en común, y es que tanto juego como película muestran sociedades distópicas futuras, pero en una forma diferente (y ahí acaba cualquier posible semejanza). Para encontrar el claro referente de Metropolis tenemos que irnos a Trojan, el arcade de Capcom lanzado en 1986, tres años antes de que lo hiciera el título de Topo, con una jugabilidad similar y el personaje también va equipado con espada y escudo.
El argumento es el siguiente: un holocausto nuclear ha devastado la ciudad, las estructuras gubernamentales han colapsado y prevalece la ley del más fuerte. Nuestro protagonista, Geitor, es el encargado de pacificar la ciudad. Para ello, deberemos recorrer la ciudad hasta llegar al cuartel general de Townsman y liderar una revuelta que lleve la paz a las calles de Metropolis. Para conseguir nuestro objetivo deberemos eliminar los 5 tanques con armamento nuclear que están en posesión de los malvados de la ciudad.
Nos enfrentaremos a tres bandas criminales: Los Guerreros de la Muerte, expertos en el uso de la espada y el escudo; Los Dartfire, mutantes que lanzan bolas de fuego; y las Girlkiller, una banda de mujeres agresivas como bestias.
Una de las cosas que siempre me llamó la atención de este juego, es el doble uso del ataque y la defensa. Me explico: en muchos de los arcade de la época, existía el ataque (ya fuera disparos, con espada o cualquier otra arma) y la defensa solía ser esquivar el ataque enemigo ya fuera saltando, agachándose, etc. En Metropolis, al igual que sucedía en Trojan, había que utilizar el escudo. Por poner un ejemplo, con el escudo podremos hacer rebotar la bola de fuego lanzada por los Dartfire. Con esto no estoy diciendo que no hubiera antecedentes, el mismo Trojan lo es, pero cuando lo jugué para mí no era nada habitual.
Una cosa importante a tener en cuenta es que los enemigos nos dañarán de dos formas: por ataques y si nos pasan por encima, por lo que será mejor abatirlos antes que intentar "adelantarlos". Como solía suceder en estos juegos, la clave del éxito, en gran parte, está en aprender las rutinas de los enemigos, y no olvidéis el uso del escudo! Se desarrollaba, como tampoco podía ser de otra manera, con el scroll lateral tan típico de la época.
Metropolis es entretenido, pero quizá tiene poca variedad de enemigos y el diseño del mapeado es algo repetitivo. Respecto a la interfaz, es visualmente atractiva con la única información de la barra de vida. Como apunte curioso, si mueres, aparece un mensaje graciosamente "faltón": has fallado miserablemente, vuelve a intentarlo.
Otra cosa que se echa en falta, es la aparición de algunos ítems o power-ups que le den algo más de juego. Sí que a veces al matar a algunos enemigos se recarga la barra de energía, pero nada más.
Lo que sí tenía Metropolis, en mi opinión, es una buena jugabilidad, el control era bastante suave y era fácil hacerse con él. Merece echarle unas partidas!