Una mezcla de rugby y balonmano futurista
Hace eones os hablamos de la primera entrega de Speedball, un buen juego de deportes futurista que nos mantuvo enganchados a nuestros teclados innumerables horas. Al contrario de lo que suele pasar habitualmente, la secuela superó ampliamente a su predecesor, dando lugar a Speedball 2: Brutal Deluxe, desarrollado igualmente por The Bitmap Brothers. Tal es su calidad, que en el libro "1001 video games you must play before you die" de Tony Mott aparece la versión de Amiga. Por si fuera poco, en los premios Amiga Power se mantuvo durante varios años entre la tercera y la cuarta posición de mejor juego de Amiga de todos los tiempos, que no es moco de pavo.
En esta ocasión, nos pondremos en la piel del entrenador del equipo Brutal Deluxe, una escuadra que no pasa por su mejor momento, y tendremos que convertirlos en un equipo temible. Disputaremos en varias competiciones, la liga, dividida en dos categorías de 8 equipos y dos torneos en formato eliminatoria.
La mecánica del juego en sí es muy similar a la primera. Dos equipos protegidos hasta los dientes se enfrentan en una cancha cerrada, donde el objetivo es acumular más puntos que el rival. Hay varias formas de conseguirlo, una es la de introducir la pelota en la portería contraria, que nos reportará 10 puntos, pero también lanzando nuestra pelota contra las estrellas que hay a un lado de la pista (2 puntos cada una, 10 adicionales si las marcamos todas), y multiplicadores que aumentarán nuestra potencia anotadora si los tenemos activados. Para interceptar la pelota, o bien nos podemos poner en su camino o bien podemos intentar placar a nuestros contrincantes. Otra cosa fundamental es la barra de resistencia de cada jugador, que se muestra en la parte inferior.
Hay un atajo a cada lado de la pista que si metemos la pelota por ahí aparecerá en el atajo opuesto en la misma dirección que la lanzaste. Viene bien para librarse de la presión de los contrincantes.
¿Por qué fue tan bueno? Porque la jugabilidad es increíble, es un juego muy dinámico, que no da tregua, el control es impecable, y la parte de gestión le da un plus que muchos juegos no tenían en ese momento. En definitiva, es tremendamente divertido y adictivo.
Cada partido consta de 2 partes (el tiempo está en la parte inferior central de la interfaz) y, evidentemente, gana el que más puntos tenga.
Además de la puntuación, podremos recoger las monedas que aparecen en la cancha, fundamentales para ir mejorando a nuestros jugadores. También hay power-ups que nos permitirán ciertas ventajas como poder congelar a nuestros contrincantes, o tener más aguante cuando los contrincantes nos embisten.
También tiene una parte de gestión de nuestro equipo. Con el dinero (credits) conseguido durante los partidos, podremos mejorar el equipamiento de nuestros jugadores, dependiendo que parte de la armadura mejoremos realmente estaremos aumentando una habilidad en concreto. Por poner un ejemplo, si mejoramos la armadura de las piernas, estaremos aumentando la velocidad de ese jugador. Hay muchas más habilidades como ataque, defensa, resistencia... Hay una cosa que tenemos que tener en mente y es que cada jugador tiene un tope de mejora para las habilidades.
Pero no será la única manera de mejorar el equipo. Podemos acudir al mercado para realizar fichajes, teniendo en cuenta que cada jugador tiene su posición y el objetivo es mejorar la plantilla ya existente.