Los más duros de la lucha
Aunque el wrestle nunca ha dejado de gustar, hoy en día es un espectáculo que tiene mucha más acogida en países como Estados Unidos o México que en Europa. Sin embargo, a principios de los 90, tuvo un repunte muy importante en el viejo continente gracias a míticos luchadores como Hulk Hogan o El Último Guerrero.
SEGA era consciente de ello, por lo que decidió lanzar para las arcade un juego basado en el wrestle, al que títuló Wrestle War. Ni dos años más tarde, decidió hacer un port para su flamante consola Mega Drive, aunque ni la versión arcade ni la versión casera resultó ser un buen juego.
En el juego tomamos el papel de Bruce Blade, un luchador novato que debe combatir con hasta ocho luchadores con el objetivo de ganar el titulo de la Sega Wrestling Alliance.
La mecánica del juego es extremadamente sencilla, disponemos de unos cuantos movimientos básicos como la patada o el puñetazo, y luego el pressing que, tras agarrarnos con nuestro contrincante, deberemos aporrear los botones para ganarlo y hacerle una llave a nuestro rival, o lanzarlo contra las cuerdas para golpearlo a la vuelta. Para vencer, deberemos bajar todo lo posible la vida de nuestro rival (pisotearlo cuando está en el suelo por una llave es especialmente eficaz) y entonces lanzarnos encima de él para iniciar la cuenta hasta 3, si conseguimos aguantar, habremos vencido el combate.
La dificultad (y la vida) de nuestros contrincantes irán en aumento a medida que avancemos en el campeonato, y cada uno de ellos tiene sus movimientos especiales con los que tendremos que andarnos con cuidado. También nos tendremos que andar con ojo cuando luchemos fuera del ring, primero para que no nos estampen la silla plegable en la cabeza y segundo porque si estamos más de veinte segundos fuera, estaremos descalificados.
Y el juego no tiene más. La interfaz es muy sencilla, en la parte derecha se ve el tiempo restante para que finalice el combate (deberemos vencer antes de que llegue a 0), así como nuestra vida y la de nuestro rival, además de un texto que nos indica si hay algún título en juego.
Prácticamente todos nuestros contrincantes están "inspirados" en algún luchador real, pero al no pagar licencias, ni utilizaron el nombre real e intentaron cambiar su apariencia lo suficiente como para no tener problemas legales. De hecho, en el luchador hipervitaminado de la portada, en Europa es diferente puesto que en Japón el luchador era, sin ningún lugar a dudas, Hulk Hogan.
Resumiendo, Wrestle War es un juego mediocre pero que tuvo su cierta popularidad en su momento, aunque resultaba poco jugable y repetitivo.