Recordando
Retro Review de Plok

Volarán extremidades

Volvemos al género de los plataformas para hablar de Plok, un título exclusivo de Snes que pese a no ser muy conocido goza de mucha calidad y originalidad.

Plok fue lanzado en el año 1993, desarrollado por Software Creations y distribuido por Tradewest en EEUU, por Nintendo en Europa y por Activision en Japón. Aunque gran parte de la prensa lo calificó como un juego notable, Plok no llegó a calar en el gran público, consiguiendo pocas ventas y quedando rápidamente en el olvido. En una época el género principal eran los plataformas, era difícil competir con gigantes como Nintendo, Capcom o Sega.

Este juego lleva el nombre de su protagonista, Plok, quien se levanta una mañana y ve que han robado su preciosa bandera cuadrada del tejado de su casa. La primera misión de Plok es recuperar esta bandera. Una vez vuelve a casa con su bandera, se encuentra con que su tierra ha sido invadida por los fleas, unos seres azules muy molestos. Plok debe enfrentarse a los fleas para que la paz vuelva a reinar en su tierra.

Este título es un plataformas puro y duro. Plok tiene que ir avanzando a traves de los niveles venciendo enemigos, sorteando obstáculos, recogiendo objetos, encontrando niveles secretos y por supuesto, saltando de plataforma en plataforma. El punto fuerte del juego es la habilidad de Plok para lanzar sus extremidades, las cuales vuelven a él de forma automática tras recorrer una corta distancia o golpear a un enemigo. Al pulsar el botón de ataque Plok lanzará una de sus extremidades, pudiendo hacer cuatro ataques consecutivos. Primero lanza sus brazos y despues sus piernas. Hay que ir con cuidado ya que una vez lanzamos las dos piernas plok pierde la habilidad de saltar y somos una presa fácil. Este ataque también sirve para activar interruptores, los cuales nos utilizarán esa parte del cuerpo hasta que la recuperemos de unas perchas que hay por el escenario. Otra habilidad es un salto en espiral, que nos permite llegar a grandes alturas, aunque no podemos atacar con él.

En el mundo de Plok encontramos multitud de objetos para recoger. Los más comunes son conchas que nos dan puntos y nos rellenan un marcador que al llenarse nos proporciona una vida extra. También encontramos unas admiraciones que nos dan una de las letras de la palabra Plok, una vez tenemos cuatro, nos dan una continuación. En cuanto a power ups encontramos unos regalos que vuelven más fuerte a Plok durante unos segundos, transformándolo en un boxeador, otorgándole un lanzallamas, un rifle, unas pistolas o un lanzacohetes. También hay regalos que permiten a Plok controlar un vehículo como un helicóptero, una moto o un tanque.

Otra virtud de este juego es la gran cantidad de zonas secretas que oculta. Hay que investigar bien los niveles para encontrarlas todas y conseguir la mayor cantidad de conchas posibles. Muchas de estas zonas se activan golpeando unos frutos que encontramos en unos árboles, una vez activos nos lleva a la zona secreta donde tendremos un tiempo limitado para completarla.

A mitad de partida encontramos el amuleto perdido del abuelo de Plok. Este amuleto otorga un nuevo ataque a Plok, ya que permite transformar las conchas que recogemos para atacar a nuestros enemigos.

El juego tiene dos puntos negativos que dañan bastante la experiencia de juego. El primero es su elevada dificultad, por ejemplo, en ocasiones encontramos obstáculos que es imposible esquivarlos si no sabemos con antelación que van a aparecer en pantalla, ya que el tiempo de reacción que tenemos para esquivar es mínimo. Algunos enemigos y sobre todo los jefes finales también nos harán sudar para superarlos. Aunque la barra de vida de Plok parece bastante abundante, se vacía rápidamente con unos pocos ataques recibidos. A la dificultad del juego se suma la imposibilidad de guardar partida o de continuar mediante passwords, una vez se nos acaben los vidas y las continuaciones, deberemos empezar desde cero, y el juego no es precisamente corto.

Plok es un plataformas muy colorido y con una historia muy cómica que se disfruta muchísimo, pero puede tirar a muchos jugadores para atrás debido a su dificultad. De todas formas, es una joya oculta de Snes que todo amante de las plataformas debería probar.