Un survival horror "redondo"
La década de los 90 fue el boom de los juegos en tres dimensiones, y en inicio surgieron varias tecnologías para crear este tipo de gráficos. Aunque la más famosa fue y es el uso de triángulos para formar polígonos, también hubo otras, como los gráficos elipsoides, que consiste en crear los modelos en 3D usando este tipo de formas geométricas. Nuestro protagonista de hoy, Ecstatica, usa este tipo de gráficos, y como podéis comprobar le da un aspecto único y extravagante.
Ecstatica es un juego de aventura y survival horror que fue desarrollado por Andrew Spencer Studios y publicado por Psygnosis en 1994 para MS-DOS. El juego tuvo fama en su momento tanto por sus gráficos como por su atrevida puesta en escena, y la crítica lo valoró positivamente. El juego fue calificado como Mature en algunos paises, ya que mostraba escenas especialmente violentas (personas crucificadas, colgadas o empaladas) y además salían desnudos completos (aunque daban bastante risa al estar hechos de esferas), algo muy raro en los videojuegos de la época. Lamentablemente, este título se ha ido olvidando con el tiempo aún siendo un juego notable pese a sus imperfecciones. En 1997 se publicó la segunda parte, pero pasó bastante desapercibida.
El juego se sitúa en la Europa del norte del año 928 DC. El protagonista de la historia es un viajero (el cual podemos elegir que sea hombre o mujer) que llega a la aldea de Tirich en busca de comida y agua. Lamentablemente, se encuentra con un lugar invadido por los demonios a los que deberá enfrentarse para liberar a la aldea de esa terrible maldición.
Una vez en la aldea, podemos movernos libremente con nuestro personaje por sus calles y casas. Para avanzar en la aventura, debemos explorar cada rincón para encontrar objetos y armas que nos permitan resolver los puzzles y derrotar a los demonios que nos acechan. Solo podemos llevar dos objetos a la vez, uno en cada mano, así que debemos saber muy bien donde dejamos los objetos para poder recuperarlos cuando nos hagan falta.
Por la aldea encontraremos diferentes monstruos que nos pondrán las cosas difíciles, como seres pequeños con mala baba, minotauros, un oso borracho o el hombre lobo, el enemigo más famoso y odioso del juego. Este hombre lobo nos hará la vida imposible, ya que nos emboscará cuando menos lo esperemos y es un enemigo casi imposible de matar. La estrategia para él es pegarle para hacer que huya o huir nosotros mismos y ocultarnos en algunos de los escondites que hay por el escenario. Para combatir a estos seres, disponemos de un sistema de combate de dos ataques diferentes y un botón para esquivar ataques.
El juego no dispone de ningún HUD para ver el estado de salud del personaje. El daño del personaje lo veremos en la forma de estar de éste, y su salud se irá restableciendo poco a poco con el paso del tiempo.
Podemos guardar la partida cuando queramos, y es de agradecer, porqué en este juego cualquier paso en falso supone la muerte. Además de enemigos que pueden acabar con nosotros en un momento, también hay multitud de trampas por los escenarios que darán fin con nuestra existencia.
Como ya he comentado anteriormente, uno de los factores que más llamó la atención de este juego eran sus gráficos. Como muchos juegos de la época, el juego usaba fondos prerrendizados con personajes en 3D sobre ellos. Lo curioso es que estos personajes no estaban formados por polígonos usuales, sino por elipsoides que daban al juego un aspecto bastante divertido. Por supuesto, esto también jugó en su contra, ya que este experimento no daba tan buenos resultados como los clásicos polígonos y obviamente no gustó a todo el mundo.
Como pasó en muchos de los juegos en 3D de esta época, uno de los peores puntos era el control del personaje. La perspectiva en algunos momentos junto a un control poco preciso podía llegar a desesperar y resultar bastante frustrante.
Aunque Ecstatica está lejos de ser un juego perfecto, se puede llegar a disfrutar sin problemas. Si os gustan los survival horror y no habéis probado nunca este juego, puede ser una grata sorpresa descubrir el macabro mundo que Ecstatica ofrece al jugador.