Jugando con tanques
Hoy volvemos casi 30 años atrás en el tiempo para recordar uno de los juegos de NES que en su momento tuvo cierta repercusión, pero ha quedado bastante olvidado con el paso de los años. Hablo de Battle City, un juego arcade en el que hay que ponerse a los mandos de un tanque para defender nuestra ciudad.
El juego fue desarrollado y distribuido por Namco en el año 1985. Battle City es la secuela de Tank Battalion, un juego de recreativa de 1980. Como el juego fue bien recibido, salieron versiones para el Arcade Nintendo Versus, para el PC X1 y años más tarde, en 1991, fue publicada una versión adaptada para Game Boy. El juego también vio la luz en 2007 en la consola virtual de Wii, y este mismo año para Wii U. Tank Force, el sucesor de Battle City, fue publicado en el año 1991 para Arcade.
Como juego de 1985 que es, la mecánica no es muy compleja, aunque eso no quiere decir que sea un juego fácil. Controlamos un tanque con el que tenemos que hacer frente al ejército de tanques que intenta destruir nuestra base, representada con la figura de un águila. El juego se ve desde una vista superior, como si fuera un mapa, y podemos movernos por él tanto vertical como horizontalmente. El nivel se completa si vencemos a todos los tanques, y perdemos en caso de que nuestro tanque o nuestra base sean destruidos.
El juego está compuesto en 35 niveles de 13 cuadrados de alto y 13 de ancho, con lo que podemos ver todo el nivel en una sola pantalla. En los niveles hay diferentes obstáculos, como muros, los cuales podemos destruir si son de ladrillo, agua que no podemos atravesar o hielo que dificultan el control del tanque.
En cada nivel encontramos 20 tanques enemigos, los cuales están divididos en cuatro tipos de dificultad. A medida que avanzamos en el juego, encontramos más tanques de nivel superior que hacen el juego más complicado. Hay que tener cuidado ya que habrá tanques que harán de señuelo para alejarnos de nuestra base mientras otros tanques intentan destruirla y acabar con nosotros.
Cuando destruimos un tanque que parpadea, deja caer un power up que podemos recoger. Hay diferentes tipos de power ups: tanque, que nos da una vida extra; estrella, que mejora nuestro tanque, y cuando llevamos 3 estrellas podemos destruir las paredes de metal; bomba, que destruyen los tanques enemigos en pantalla; pala, que protege la base durante un tiempo limitado; reloj, que paraliza a los tanques enemigos; y por último el escudo, que hace invencible a nuestro tanque durante un tiempo.
Hay dos características que hacen a este juego muy especial. Fue de los primeros en permitir a dos jugadores jugar simultáneamente, y también fue uno de los primeros de NES en incorporar un editor de niveles que permitía a los jugadores jugar a sus propias creaciones. Lo malo es que estos mapas no se podían guardar.
Battle City fue una de las víctimas de la piratería de entonces, y salieron diversos hacks del juego que fueron distribuidos en cartuchos multi juegos de la época, además de ir incluído en clones de NES que se distribuían por muchos países. De hecho, yo este juego lo jugué en su momento en una consola clónica, conocida como NASA.
Lo cierto es que actualmente no tiene mucha gracia jugar a este juego, pero en su momento fue un título muy divertido, perfecto para jugar en compañía gracias a su modo de dos jugadores simultáneo. Un clásico de Namco que merece un pequeño lugar en la historia de los videojuegos.