Recordando
Retro Review Last Battle

La avanzadilla de Mega Drive

Hoy vamos a tratar uno de los seis juegos que formaron el catálogo de salida de Sega Genesis en territorio americano, que sin llegar a ser un juego notable, sí resulta entretenido a pesar de algunas críticas desastrosas. En su traducción al inglés sufrió los avatares de las licencias, perdiendo el nombre del Puño de la Estrella del Norte, llamándose en zona PAL y NTSC Last Battle.

Para sortear una posible denuncia por violación de los derechos de la afamada serie manga, los desarrolladores cambiaron los nombres de todos los personajes así como sus estilos de lucha, aunque la trama principal sufrió pocos cambios. Sin embargo, nombres aparte, el cambio más notable que sufrió el juego fue su reducción de violencia respecto a su versión japonesa, donde las cabezas explotaban a pares y los enemigos morían de formas muy sanguinolentas, mientras que fuera de Japón se limitaban a salir disparados por la pantalla al recibir el impacto que los mataba.

En Last Battle controlaremos a Aarzak (en su versión europea) un fornido guerrero que deberá derrotar a tres generales y a los lacayos de Duke, el malvado enemigo que mantiene presa a su novia. El juego es un beat 'em up de scroll lateral donde nuestro personaje dispondrá de cuatro movimientos básicos, patada, puñetazo, agacharse y salto, que podremos combinar para hacer patadas voladoras o bajas, lo mismo que para los puñetazos. En la interfaz inferior podemos ver dos medidores importantes, uno el de la vida (cuyo límite se verá aumentado a lo largo de la historia al hablar con ciertos personajes) y un medidor de fuerza que va incrementando al matar enemigos y, al llegar a ciertos puntos, hará que nuestro personaje pase a un estado especial de fuerza (rompiendo la camiseta con sus músculos) que nos proporcionará ataques más rápidos y poderosos.

Dispone de tres tipos de pantallas, las normales en las que nuestro objetivo será avanzar a través de ella acabando con todos los enemigos que salgan a nuestro paso, las de laberinto donde al matar enemigos podremos recargar nuestra barra de vida y cuya mayor dificultad está en encontrar el camino de salida y sortear las trampas (si lo hacemos bien podremos recargarla entera al liberar a ciertos personajes) y las de enemigo final donde combatiremos normalmente en 1 contra 1 y donde es muy recomendable aprender las secuencias de ataque / defensa del enemigo para aumentar nuestras posibilidades de derrotarlo.

En las pantallas normales dispondremos de un límite de tiempo para completarla, aunque la muerte no es inmediata sino que la barra de vida irá decreciendo hasta morir. Tendremos que andar con mucho ojo, puesto que Last Battle es un juego muy difícil y, además, solo tenemos una vida, si morimos tocará reempezar desde 0.

Una de las peculiaridades del juego respecto a otros del mismo estilo es que al finalizar una pantalla iremos al mapa, donde podremos escoger el camino a seguir, perdiendo algo de la linealidad típica de estos juegos, aunque básicamente acabaremos jugando las mismas pantallas, pero el orden en que las escojamos puede facilitarnos (o dificultarnos) nuestra ya de por sí ardua tarea. El juego consta de cuatro capítulos que las opciones del propio mapa nos delimitará.

Su lanzamiento en Japón se produjo en el año 1989, llegando un año más tarde a Europa. En el 1991 decidieron sacar dos versiones, una para Commodore 64 y otra para Amiga, que tuvieron escasa repercusión y fueron programadas por Elite en lugar de Sega.

En resumen, Last Battle perdió algo de encanto por no tener la licencia de El Puño de la Estrella del Norte en territorio europeo y sin duda pudo ser mejor juego de lo que realmente fue, pero a pesar de todo resulta entretenido y discrepo con algunas de las reviews de la época donde lo situaban como un juego bastante malo.