Recordando
Retro Review de David Wolf: Secret Agent

La amenaza del caza SF-2

Para la retro review dominical de hoy, os traemos un juego que siempre me pareció bastante curioso porque decidió apostar por dos tecnologías que aún estaban en un estado de desarrollo inicial: la digitalización de personajes o actores reales y el uso del 3D que, si bien ya había juegos que lo utilizaban, aún era una tecnología a la que le quedaba mucho por avanzar.

El juego no es otro que David Wolf: Secret Agent, de la compañía Dynamix, no tan conocida como las más top del mundillo, pero que a mi siempre me ha parecido muy a reivindicar, porque no se limitó a "copiar" las mecánicas de juego que otros utilizaban, si no que se dedicaron a darle su sello personal, con mayor o menor fortuna, pero regalándonos juegazos como Rise of the DragonHeart of China.

Con David Wolf: Secret Agent nos tenemos que remontar al año 1989, para que os hagáis una idea de lo complicado que era en ese momento realizar algunas de las secuencias que componen el juego. Sea como fuere, el juego nos mete, como ya os podéis esperar, en la piel de David Wolf, un agente secreto que debe detener al malvado Bruno Vasto, quien ha robado un caza de combate experimental SF-2 y amenaza con reducir la ciudad de Nueva York a cenizas. Como buen agente secreto, no iremos a las bravas, si no que nos tendremos que infiltrar en la organización, recuperar el caza y salvar el mundo.

Lo primero que llama la atención es la intro del juego. Se nos empiezan a presentar las caras de los personajes digitalizados, junto a su nombre, como si fueran los créditos iniciales de una película de espías. Un apunte importante: estas digitalizaciones no tienen movimiento, no son cinemáticas, pero para el año 1989 estaban geniales.

Una vez vista la intro y después de un diálogo inicial, el juego empieza a tope con uno de sus puntos fuertes: los distintos "minijuegos" de los que está compuesto, y aquí sí, es donde entra el 3D. Para la primera escena jugable, nos montaremos en un ala-delta equipado con una ametralladora, y tendremos que derribar a los ala-deltas enemigos, planeando hacia ambos lados para dirigir bien la trayectoria.

Otra de las características del juego es que no está exento de humor: en esta escena de los ala-deltas, lo primero que dice el bueno de David es: "El cielo es mío" y al derribar a algún enemigo: "Dale recuerdos a los peces" (la escena ocurre en un acantilado al lado del mar).

En la siguiente escena jugable, manejaremos un coche en una persecución. El coche va equipado, como no, con una ametralladora, pero también con aceite que podremos tirar al asfalto para hacer derrapar a nuestros perseguidores, así como 4 misiles, con los que podemos enviar al más allá a nuestros enemigos.

Definiría el juego como una película jugable. Combina las escenas de diálogos donde vemos a los personajes digitalizados y donde se nos va explicando la historia, con las escenas jugables en 3D, bastante variadas. Además de las que hemos comentado hay otras como la de lanzarnos en paracaídas o pilotar un avión.

Resumiendo y como ya he dicho antes, me parece un destacable juego teniendo en cuenta el momento en el que se lanzó, un momento ahora lejano donde los juegos intentaban irse acercando al realismo del cine, algo que hoy en día está ya más que superadísimo.